El aumento de peso es el gran enemigo invisible que parece no importar demasiado. A pesar de que sabemos que nuestra una sociedad es mayoritariamente sedentaria y con hábitos alimentarios cada vez menos sanos, seguimos sin darle la importancia que se debe. Y existen formas de poder luchar contra la obesidad, y perder peso de forma natural.

Un gran apoyo sería que existiesen políticas educativas que favorezcan el aprendizaje sobre alimentación y ejercicio físico. Y así, poder luchar contra la facilidad para hacer publicidad engañosa, los intereses farmacéuticos y de grandes lobbies de alimentación, etc.

Pero si, la situación es grave. La cantidad de muertes al año relacionadas con los malos hábitos, son elevadísimos.

Ahora bien, ¿podemos perder de peso de forma natural? ¿es complicado perder peso o o es más sencillo de lo que creemos?

Hablemos de los factores o situaciones básicos que podemos hacer para mejorar nuestra salud y composición corporal (reducir el porcentaje de grasa, manteniendo un buen porcentaje de tejido muscular):

• Las calorías cuentan, pero no todas son iguales. Si no entendemos que los alimentos impactan de manera diferente en nuestro organismo, no podremos mejorar nuestra salud. Si pensamos que 500 calorías de arroz es igual a 500 calorías de chocolate, fracasaremos. Hablamos de hormonas, de cómo funciona nuestro cuerpo y de cómo movilizamos, quemamos y almacenamos la energía.

• Si entendemos el punto anterior, este es el más sencillo de llevar a cabo y a su vez, el que gran parte de la población falla. Es el hecho de tener en casa alimentos poco saludables. El cajoncito con las chuches, o las chocolatinas, o el lugar donde guardamos todos esos ultra procesados que supuestamente es sólo para cuando hay visitas. ¿Qué pasa, es que no podemos usar alimentos sin procesar e igualmente gustosos? Pues claro que sí. Tampoco quiero decir que haya que eliminar del todo cualquier alimento de ese tipo y hasta diría que es saludable el poder hacerlo, sin ese sentimiento de culpabilidad. Simplemente has aprendido a llevar unos hábitos y dentro de ellos, nos podemos permitir comer esas cosas menos saludables de forma puntual. Bueno, a lo que iba, está más que comprobado que cuanta más comida basura tengamos en casa, evidentemente es más sencillo comerla. Este pequeño matiz, que para mucho será una tontería, provoca que aquellas personas que estén siguiendo un plan de alimentación o dieta, finalmente se la salten frecuentemente por tener todo lo que no debemos a mano.

• En este punto quiero hablar de si tenéis algún tipo de patología. Por ejemplo, si eres diabético, si tienes problemas a nivel de tiroides, etc. Sea lo que sea, lo que nos está orientando es que deberemos tener una dieta adecuada a tu situación. Del mismo modo, deberemos adaptar el entrenamiento. Aquí estamos hablando de que, “no podemos aplicar el mismo plan a todo el mundo”. La individualización es vital.

• El tercer pilar, además de la alimentación y el ejercicio, es el descanso. Dentro del descanso hablo desde el sueño hasta como llevamos la recuperación si hacemos ejercicio. Es tan importante este punto, que podemos llegar a desequilibrar nuestras hormonas (como el cortisol), el aumento de la fatiga y por lo tanto menor capacidad para movernos hará que almacenemos más grasa. Estas situaciones, pueden degenerar en ansiedad y estrés, por lo que se puede traducir en aumento del hambre (hormonas como la grelina aumenta).

Para hablar de estrategias y soluciones, posiblemente hay que analizar cada caso. Tengo multitud de videos hablando de qué hacer en situaciones de las que he hablado anteriormente.

De todos modos, seguiré publicando artículos para dar más soluciones ante algo tan extendido como es el aumento de peso no saludable en la población.